Las barras se sujetan mediante unos soportes especiales que se fijan con tacos y tornillos a la pared o al techo. Se puede optar por uno u otro emplazamiento en función del espacio disponible junto a la ventana o de las preferencias de cada uno.
Existen barras de diferentes materiales para colgar cortinas (de madera, de forja, de acero, etc.) y con distintos acabados (pintadas, con brillo, en acabado mate, con efecto envejecido, etc.).
Si quieres colgar un visillo y una cortina (o caídas de cortina a los lados) puedes hacerlo instalando una barra doble. Se trata de dos barras, una para cada uno de los elementos, que se sostienen con un soporte doble.